Evite a las empresas de seguridad privada que podrían generarle grandes pérdidas económicas
Seguramente recordará el polémico caso de los siete millones 114,500 cartuchos útiles que fueron robados en Guanajuato (y después recuperados) durante un traslado a bordo por dos tracto camiones hacia Texas. Bueno, en esa ocasión se dijo que el asalto lo había cometido uno de los cárteles más poderosos del país, y que había sido planeado por personas que conocían el valor de la carga.
La pregunta es: ¿cómo un cargamento tan grande, valioso, y por lógica, tan atractivo para la mafia, pudo ser robado si supuestamente iba custodiado?
Hay que empezar diciendo que el traslado era escoltado por un cuerpo de seguridad muy famoso de Estado de México, que no es una empresa de seguridad privada, pero tampoco es un ente público, por lo tanto, carece de regulación legal, al igual que todas las policías auxiliares y complementarias que ofrecen sus servicios de seguridad privada.
Aclarado este punto, podemos decir que muchas empresas no reguladas, debido a su inexperiencia y desconocimiento en este tipo de traslado, no cumplen con las disposiciones de la Ley federal de Armas de Fuego y Explosivos. Concretamente, donde se establece que para su transporte se debe contar con un certificado expedido por la autoridad administrativa del lugar donde serán entregadas las municiones, el cual avale que tiene todos los requisitos de seguridad. En este caso, las autoridades estatales no estaban notificadas del movimiento de esa mercancía en tránsito, y del equipo de seguridad no llevaba medios tecnológicos suficientes para prevenir o reaccionar en caso de una contingencia.
A fin de prevenir situaciones como esta que pongan en riesgo la seguridad de su cargamento e incluso de la población, hemos sido insistentes en la importancia de verificar la experiencia y capacidad de su socio de seguridad privada. Debe ser una firma seria y profesional. Evite aquellas que ofrecen servicios de seguridad privada pero no lo son, pues no están ni fiscalizadas y podrían generarle grandes pérdidas económicas, e incluso consecuencias graves para el negocio.