¿Qué es Seguridad Privada?

Seguridad Privada

¿Qué es la seguridad privada de alto nivel

El México actual ha sido testigo de un importante fenómeno en el mercado, la seguridad privada, que es un sector que a lo largo de los años se ha ido incorporando de manera exitosa, debido a la alta demanda de seguridad e integridad que todos desean tener.

De esta manera, entendemos que la seguridad privada es un sistema integrado por personas y recursos, con el fin de eliminar, reducir y controlar los riesgos/amenazas a los que una persona, organización, objeto o entidad puede estar expuesta.

La seguridad privada de alto nivel comprende adicionalmente, entonces, recursos tecnológicos y logísticos de alta calidad que permiten afrontar todos los entornos posibles.

Es indispensable contar con una tecnología de punta para alcanzar la protección que tanto se desea; con el fin de que el propietario se sienta defendido ante los diferentes ataques.

Brindar protección o estado de bienestar es un tema de prioridad, que se consigue minimizando los riesgos a niveles aceptables e inherentes a cualquier actividad.

Pero, entremos en materia y conozcamos todo lo que implica la seguridad privada. En este artículo analizaremos de qué trata, sus tipos y procedimientos, entre otros aspectos.

Tipos de seguridad

Hablar de protección y seguridad implica conocer los distintos tipos y procedimientos que existen en los sectores, por ejemplo:

  • Privada.Para su disfrute se debe contratar una empresa especializada. Funciona como un sistema auxiliar de la seguridad pública.
  • Social. Es un sistema integral conformado por un conjunto de servicios, profesionales e instalaciones, encargado del bienestar de los ciudadanos. Por ejemplo, antes pandemias, enfermedades, desempleo, problemas de vivienda, etc.
  • Industrial. Consiste en la protección de zonas industrializadas, conservación de los minerales, fuentes de energía y medio ambiente, control de la fabricación de productos y procedimientos para tratar los residuos industriales, contaminantes o peligrosos. Su objetivo es mantener y aplicar medidas que eviten accidentes, y que permitan que la vida de los trabajadores se encuentre a salvo.
  • Mental. Se refiere a la capacidad de entender y de actuar de una persona, para hacerle frente al estrés de la vida diaria, sin llegar a un estado de alarma. En este sentido, se debe tener presente que, sin tal tipo de protección personal se pueden sufrir accidentes, caer en estados depresivos e incluso morir.
  • Ciudadana. Son planes estratégicos que se implementan con el fin de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. En este punto se aplica justicia eficaz y se previenen los actos delictivos.
  • Laboral. Se asocia a los derechos de los trabajadores, para evitar y minimizar los riesgos en el entorno laboral. El objetivo es aplicar normativas y acciones necesarias para que las personas estén seguras y sus vidas no corran peligro.
  • Física. Es la razón principal de todo sistema integral de resguardo y seguridad a personas, concurrencias masivas y sus rotaciones y fluctuaciones a lo largo del día. Los controles implementados suelen ajustarse según las necesidades.

A partir de los diferentes tipos de amparo descritos, en el caso de la protección privada, también existe específicamente una clasificación adicional, según las actividades que se realizan. A continuación, veremos los distintos servicios que ofrece la seguridad privada.

Seguridad privada y sus tipos de servicios 

Previo a implementar los servicios privados de seguridad, se debe realizar un estudio y recopilación de datos para saber exactamente qué tipo se aplicará, y qué se busca con respecto a la protección. Por este motivo, se debe efectuar:

  • Mapeo de riesgo. Consiste en identificar delitos en la zona y análisis estadísticos de dichas actividades.
  • Localización de vulnerabilidades. Tipificación de quiénes o qué pueden hacer daño, atacar o extraer pertenencias, entre otros delitos.
  • Estudio del entorno. Definir el o los anillo (s) de protección interno (s) o externo (s).

Definidas estas particularidades, se podrá determinar el tipo de seguridad privada requerida, entre las cuáles se encuentran:

  • Vigilancia fija. El personal, guardias o vigilantes se encuentran en un lugar determinado; por ejemplo, dentro de casillas de seguridad. Aquí aplica la ejecución de recorridos por los alrededores, pero sin alejarse mucho del puesto de trabajo. Este tipo de resguardo se ofrece en edificios, residencias, oficinas, colegios, universidades, áreas bancarias, centros comerciales, etc.
  • Vigilancia móvil. En este caso se efectúan rondas en distintas áreas o en lugares de grandes dimensiones, para impedir que ingresen intrusos o se ejecuten actividades delictivas. Los vigilantes suelen utilizar transporte para su movilidad. Por lo general, la seguridad es proporcionada a empresas, galpones o fábricas de gran extensión. Por ejemplo, industrias agrícolas, mineras o energéticas, que deben estar siendo supervisadas, constantemente, en todas sus áreas.
  • Transporte de valores. La idea es proteger el dinero u objetos de gran valor al momento de movilizar, trasladar y custodiar la carga de un punto a otro. Este servicio suele utilizarse en el sector bancario, para el traslado de las remesas. El entrenamiento del personal implica saber moverse de manera rápida y efectiva, captando las intenciones de los sospechosos.
  • Escolta. Este sistema de protección es uno de los más completos, y combina los tres servicios anteriormente descritos. Se caracteriza por el porte de armas de fuego, aunque en algunas ocasiones el contrato solo incluye armas no letales; en cualquier caso, el personal cuenta con permisos para su uso. Además, debe actuar con eficacia y discreción.

Personal, sistema logístico y equipos tecnológicos

Todo plan de vigilancia y protección, debe ser proporcionado por una empresa de seguridad privada que aplique un conjunto de métodos de resguardo; hablamos de incorporar desde cerraduras especiales hasta comunicaciones digitalizadas. La tecnología en este tipo de servicio, cumple una función primordial, puesto que sin ella habría situaciones que podrían salirse de control.

En consecuencia, estas empresas deben disponer de tres puntos necesarios para proteger los bienes e instalaciones para los cuales fueron contratadas. Los aspectos a cubrir son los siguientes:

Perfil laboral del vigilante o personal

Este tipo de profesional va de acuerdo al estatus del cliente. De personalidad seria y discreta, su entrenamiento no debe ser menor a 60 horas, y eso se determinará según el tipo de servicios de seguridad que prestará. Por lo cual es importante que, dentro de las actividades que le sean asignadas, sepa manejar las siguientes particularidades:

  • Trato cordial y puntual con clientes y público.
  • Conocimiento y aplicación de los Derechos Humanos.
  • Conciliación, negociación y arbitraje. Es posible que tenga experiencia en situaciones de mediación, pero no deberá aplicarlos si no son exigidos en su contrato.
  • Control del lenguaje corporal y gestual.
  • Manejo de la legítima defensa y la disuasión presencial.
  • Aplicación de los primeros auxilios y RCP.
  • Operatividad efectiva en situaciones de evacuación.
  • Cumplimiento de órdenes y coordinación de acciones.
  • Manejo y conocimiento de la tecnología de punta.
  • Especialización y conocimiento en la industria específica del cliente.

Logística de protección

En este punto se requiere el apoyo de equipos externos como fuerza policial, emergencias médicas o bomberos, según la necesidad. Y el personal contratado deberá ser capaz de gestionar adecuadamente:

  • Manejo de los tiempos de respuestas para el contacto con las autoridades o la solicitud de auxilio. Así como, el control de la recepción de la asistencia de apoyo.
  • Efectividad en la comunicación con las autoridades públicas como policía y otros organismos de apoyo y resguardo.
  • Control en acciones no hostiles, evitando o retardando el asedio de terceros.
  • Aplicación de la protección al cliente o al público y la defensa personal (autoprotección).
  • Técnicas de arresto y control.
  • Manipulación de armas y balística.
  • Capacitación y práctica de tiro.
  • Manejo ofensivo y defensivo de automóviles.

Equipos tecnológicos

Dentro del estudio previo y recopilación de datos, deben revisarse y evaluarse los equipos de protección instalados con anterioridad en las áreas donde se ofrecerán los servicios de seguridad. Esto incluye, por ejemplo, actualizaciones de software, repuestos o cambios de cámaras y otros tales como:

  • CCTV – Circuito cerrado de televisión. El personal debe estar entrenado en su operatividad.
  • Sistemas de
    • Vigilancia, control de entradas y salidas. Debe incluirse el patrullaje o ronda.
    • Sistemas de altavoces. En caso de operar en espacios amplios.
    • Detección antihurto colocadas en las salidas.
  • Comunicaciones por radio. Handie – Talkie / VHF – UHF.
  • Señalizaciones y luces de emergencias.
  • Alarmas
    • Detección de incendios. En este punto debe incluirse personal capacitado en la interpretación de las señales.
    • Extinción de incendios, portátiles y fijos. Deberá revisarse el control y el mantenimiento periódicamente.
    • Contra robo para áreas especiales como bancos, cajeros automáticos, tesorerías, cajas recaudadoras, productos o locales, etc.

Protocolos de seguridad 

Los protocolos normativos o reglamentos se levantan a partir de las necesidades específicas de la empresa; y los mismos suelen impartirse dentro de la organización. Se trata de documentos internos que explican y consignan los procesos para la prevención de accidentes, defensa de las instalaciones, protección de productos o materia prima, resguardo del personal, dinero o valores, etc.

¿De qué se encargan los protocolos de seguridad? ¿Para qué sirven? 

En la actualidad, estos protocolos son respaldados bajo las leyes de seguridad industrial aplicadas en cada país.

Cabe mencionar que, cualquier empresa debidamente constituida, debe desarrollar y aplicar tales protocolos. Y aunque la mayoría de estas directrices son dictadas por las mismas organizaciones, la recomendación es que sean elaboradas bajo las instrucciones y el asesoramiento de expertos en el área de seguridad.

La intencionalidad de dichas reglamentaciones es:

  • Salvar vidas
  • Minimizar riesgos
  • Evitar la pérdida de productos, maquinarias e inmuebles
  • Proteger la materia prima
  • Definir y considerar los riesgos potenciales

El objetivo de los protocolos es garantizar y dejar plasmados los procedimientos de orden interno y externo, incluyendo los procesos de mantenimiento. Además, de considerar la vigilancia perimetral del lugar.

En el caso de la seguridad externa, dentro de las normativas, se debe incluir el análisis de actividades delictivas de la zona, clima, accidentes cercanos. devastaciones naturales, etc. Asimismo, las reglamentaciones deben enfocarse en hurtos y robos, desarrollo de la adecuada vigilancia e instalación de dispositivos de última generación.

¿Qué debe incluir el protocolo de seguridad?

Dentro del mismo debe contemplarse:

  • Medidas y normas generales de protección como ataques a infraestructuras, bombardeos, robos y secuestros; por más que las probabilidades de que sucedan eventos como estos sean remotas.
  • Reglamentaciones para el control de amenazas, incendios o actos violentos.
  • Prevención en caso de producirse hechos riesgosos; además de, contemplar la normativa para evitar accidentes dentro y fuera de las instalaciones.
  • Aplicación de reglas claras y prevención para la protección de las personas en general, empleados, productos y bienes.
  • Minimización de amenazas potenciales como desastres naturales.

La identificación del personal de seguridad debe hacerse según los requerimientos señalados por la empresa solicitante del servicio. De igual forma, en esta documentación se deben dejar especificadas aquellas consideraciones que involucren refuerzos en el sistema de seguridad humana, sistemas inteligentes de protección digital, equipos tecnológicos y electrónicos, etc.

Empresas de seguridad privada a contratar

Hoy en día, en cualquier parte del mundo, se requiere de empresas con servicios de calidad, dedicadas al campo de la protección de valores. Las mismas deben ofrecer una visión profesional, única e innovadora, que pueda fundamentar protocolos de resguardo, prevención de pérdidas y riesgos; así, como también análisis de vulnerabilidades.

Para la contratación de estas empresas especializadas en materia de seguridad, se deben validar algunos aspectos o características principales como:

  • Tiempo o años de servicios en el área de protección, con las debidas certificaciones, de acuerdo con la seguridad que ofrezcan.
  • Existencia de un multisistema de seguridad y resguardo.
  • Capacidad de establecer, controlar y aplicar protocolos normativos, jurídicos, operativos, financieros y administrativos.
  • Oferta de un plus de servicios como monitoreo, división armada, tecnología de seguridad o guardias adecuadamente entrenados para cumplir la función a la que son destinados.
  • Uso de apps y sistemas electrónicos con el que se puedan reportar intrusos, rutas, auxilio o activación de botón de pánico, etc.: para complementar así, todo el sistema integral de protección.
  • Sistema GPS o rastreo en tiempo real, usado como apoyo en la vigilancia y que permita de igual manera identificar al personal de turno.

En conclusión, a la hora de buscar una empresa de seguridad privada, es primordial tener la tranquilidad de que tus bienes, personal o familia estarán protegidos y resguardados bajo la vigilancia de expertos. Contrata aquellos que pueden controlar vulnerabilidades o asegurar la vida de quienes te importan.

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