Guardias Seguridad Privada en México: estrategias de formación
Cuando se piensa en guardias de seguridad privada, muchas veces, la primera imagen que viene a la mente es la de personas que utilizan la fuerza para evitar que los amigos de lo ajeno escapen o logren su objetivo. Los robos y sus intentos generan una terrible frustración a los dueños de negocios; y, como bien dijera, la escritora británica Elsa Punset: «Sólo florecemos si nuestras necesidades emocionales, en especial la protección, están atendidas».
Esta es una verdad indiscutible; y dado que, la delincuencia cada vez es más asertiva el resto de la población necesita hacer lo mismo. Por eso, en los tiempos actuales, los guardias de seguridad privada requieren de habilidades superiores a las del enfrentamiento directo. Es así como nuestro personal, en Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial ®, con su formación de vanguardia, es capaz de satisfacer las exigencias de nuestros clientes, en aspectos como:
- Protección de personas e instalaciones, de forma individual o masiva.
- Control de acceso de vehículos.
- Manejo de robos de cualquier índole.
- Control de entrada y salida de materiales en almacenes.
En efecto, nuestros oficiales cuentan con las condiciones físicas necesarias; pero, adicionalmente, dominan un conjunto de estrategias útiles para evitar la violencia y minimizar los riesgos. Sin duda, nuestro equipo de seguridad privada es de primera calidad; lo que garantiza la satisfacción de uno de los principales requerimientos de la población. Sigue leyendo la siguiente información sobre el tema.
Estrategias de seguridad actuales
Para empezar, es fundamental que el oficial conozca la desescalada, técnica que consiste en hablar con el agresor y con el público, para reducir los niveles de agitación. ¿Por qué hay que calmar también a las víctimas? Porque ciertas personas reaccionan con violencia cuando el malhechor es capturado, lo que propicia una peligrosa alteración de las masas.
Ahora bien, para aplicar correctamente la desescalada, los guardias de seguridad deben conocer los aspectos básicos del enfoque actual y su funcionamiento. Siendo los más importantes:
- Minimización del riesgo. El objetivo es que nadie se altere en exceso, dado que una reacción violenta implica un nuevo descontrol. Así, estrés, ira o cualquier otro sentimiento negativo debe ser mitigado; en especial, si en el lugar se encuentran personas mayores o enfermos que requieran tranquilidad, como por ejemplo ancianatos, casas de reposo y hospitales.
- Comunicación básica. Conectar con las personas, a través del habla, es una tarea difícil; pero, en materia de seguridad resulta clave. La idea es que el victimario, al exponer las razones de su conducta, sienta que es comprendido. Esto lo calmará y disminuirá sus deseos de discutir o generar un enfrentamiento de otra naturaleza.
- Relaciones comunitarias. En ocasiones, cuando ocurren eventos inseguros, la presencia de la policía produce desconfianza a las víctimas por no conocer al oficial asignado. De ahí surge la importancia de que, antes de producirse un acto de violencia, la comunidad y los guardias privados a cargo de su protección hayan generado empatía mutua. En tal sentido, una de sus tareas de rutina consiste en familiarizarse con el entorno.
- Buenas prácticas de trabajo. Conectando con los puntos anteriores, se encuentra la formación rigurosa de nuestros guardias. Estos saben establecer buenas relaciones interpersonales, mantener una actitud correcta, usar el lenguaje y las expresiones apropiadas, etc.
Buenas prácticas de un guardia de seguridad
Sin embargo, como ya mencionamos, dominar los conceptos básicos del nuevo enfoque de seguridad no es suficiente. Aplicarlos de manera correcta es realmente el reto, lo que se evidenciará en la práctica. He aquí otros aspectos imprescindibles en un guardia privado:
Lenguaje corporal
Este demuestra la actitud del guardia que, en todo momento, debe ser respetuosa. La empatía no justifica un exceso de confianza en el trato con los clientes. Asimismo, al dirigirse a un sospechoso, debe reflejar seguridad en el acercamiento, mantener una distancia prudencial y mostrar autocontrol. Si actúa con firmeza, manifestará al individuo que la tarea que se ha propuesto no le resultará fácil.
Profesional íntegro
La mayor felicidad de los clientes se encuentra en la captura del malhechor. No obstante, lograr que el individuo se calme, puede ser un reto para el guardia. Así, este deberá gestionar el redireccionamiento y el apoyo, para que la persona supere y desista de tales conductas.
En síntesis, la mejor manera de cuidar a las personas, materiales e instalaciones es por medio de estrategias que minimicen los actos violentos. Nuestros guardias de seguridad privada tienen experiencia solucionando dichas situaciones, con buenas técnicas que ayudarán a evitar que el agresor vuelva.